Síndrome de Obstrucción Dolorosa (Bi) I

               El “Síndrome de Obstrucción Dolorosa” (Síndrome Bi), indica dolor, sensibilidad u hormigueo de los músculos, tendones y articulaciones, debido a una invasión externa de Viento, Frío o Humedad. En Medicina China, estos síntomas provocados por estas invasiones se deben a que la circulación del Qi y el Xue se ve afectada.

               Pero para que los factores climáticos puedan atacar, debe existir una Deficiencia de Qi y Xue en el cuerpo. La obra Treatment Strategies for Assorted Syndromes (1839) dice:

               “El síndrome Bi… proviene de una Deficiencia del Qi de Nutrición y de Defensa y se debe a que el espacio entre la piel y los músculos está abierto, permitiendo así que el Viento-Frío-Humedad penetren en la Deficiencia. El Qi se ve obstruido por los factores patógenos y, no pudiendo circular, se estanca. El Qi y el Xue se congelan y, en ese momento, se desarrolla el Síndrome Bi”.

               Por tanto, en un determinado momento, la fuerza relativa de los factores climáticos patogénicos y del Qi del cuerpo es crucial para el desarrollo del Síndrome Bi. Solamente cuando los factores climáticos son temporal y relativamente más fuertes que el Qi del cuerpo, se vuelven patogénicos y causan Síndrome Bi.

               Es importante señalar que la Deficiencia necesaria de Qi para el desarrollo del Síndrome Bi sólo es RELATIVA, es decir, relativa a la fuerza de los factores patógenos climáticos. No se trata de una deficiencia absoluta, pues no es necesario para el desarrollo del Bi que el individuo sufra una Deficiencia real de Qi y Xue. Por tanto, el Bi es una dolencia aislada de los meridianos, no de los órganos internos.

               Sin embargo, en los cuadros crónicos de Bi y en los ancianos, los factores internos (Deficiencia de Qi y Xue) se constituyen en importantes factores contribuyentes para el desarrollo de la dolencia.

               Por definición, el Bi es una dolencia de los Meridianos. El dolor y la sensibilidad son causados por la obstrucción en la circulación del Qi y el Xue en los Meridianos, por acción externa del Viento, Frío o Humedad. Es importante que repasemos la estructura de los Meridianos principales y secundarios, así como la función energética de los puntos Shu antiguos, ya que son vitales para el tratamiento del Bi.

               A cada Meridiano principal le corresponde una red de Meridianos secundarios, formada por Meridianos de Conexión, Meridianos Musculares y Regiones Cutáneas.

               Los Meridianos de Conexión (Luo) conectan los Meridianos en pares Yin y Yang, a la altura de los miembros. Por ejemplo, los Meridianos de Pulmón e Intestino Grueso se unen en el antebrazo mediante sus respectivos Puntos de Conexión, P7 e IG6. Todavía más importante que esto, en el contexto del Bi, es el hecho de que los Meridianos de Conexión forman una red que distribuye el Qi en las partes más superficiales del cuerpo, no cubiertas por los Meridianos principales. Además, los Meridianos de Conexión se ramifican en una red todavía menor de Meridianos, entre los cuales hay tres tipos: los Meridianos Pequeños, Superficiales y de Sangre.

               Cualquier manifestación externa sobre la piel es un reflejo del desequilibrio de esos Meridianos menores. Por ejemplo, una decoloración de la piel refleja la presencia de un factor patógeno en los Meridianos Superficiales: si es azul o verdosa, indica Frío, si es roja, indica Calor. Pequeñas venas visibles en la piel reflejan el estado de los Meridianos de Sangre: rojo indicando calor en Sangre y púrpura indicando estasis de Sangre.

               Los Meridianos Musculares integran, básicamente, los músculos y tendones dentro del sistema Meridiano. También son más superficiales que los Meridianos principales y corren a lo largo de los músculos. Se ven afectados en todas las patologías musculares, tales como debilidad o rigidez muscular, que pueden aparecer en el Bi.

               Las Regiones Cutáneas representan doce áreas de la piel bajo la influencia de los Doce Meridianos. Son las áreas más superficiales de los Meridianos y las zonas a través de las cuales penetran en el cuerpo los factores patógenos, causando el Bi. Por tanto, también se constituyen en las áreas a través de las cuales es efectiva la terapia por la inserción de las agujas de acupuntura.

               De los Puntos de Transporte (Shu antiguos) a lo largo de los Meridianos, debajo de los codos y de las rodillas, tres son particularmente importantes en la patogenia y en el tratamiento del Bi.

               El Punto Shu (Arroyo) es un punto por el cual los factores patógenos externos, como Frío, Humedad o Viento, penetran en el Meridiano. Es también el punto de concentración del Wei Qi (Qi Defensivo).

               El Punto Jing (Río) es el punto en el cual los factores patogénicos son desviados hacia las articulaciones y tendones, donde se asientan. Esto explica el porqué los factores patógenos se pueden asentar en una determinada articulación por bastante tiempo, sin penetrar más profundamente y afectar a los órganos internos.

               El Punto Luo (Conexión) es el punto de inicio del Meridiano de Conexión. Dado que estos Meridianos fluyen en la superficie, afectando los músculos y los tendones, el Punto Luo posee una importante aplicabilidad en el tratamiento del Bi.

               En la dinámica del flujo del Qi, las articulaciones son importantes áreas de convergencia de Qi y Xue. A través de ellas, se encuentran el Yin y el Yang del Qi, convergen el Exterior y el Interior y entran y salen el Qi y el Xue. Las articulaciones también son los lugares donde convergen los factores patógenos, después de penetrar en los Meridianos, causando obstrucción del flujo de Qi y, por tanto, Estancamiento local de Qi y Xue.  Este estancamiento es responsable del dolor.

               Finalmente, el concepto anatómico Cou Li, descrito en textos antiguos, también debe ser mencionado. El término Cou Li indica por un lado la estría de la piel, músculos y órganos internos, y por otro lado, el espacio entre la piel y los músculos. Es con este último significado que el término se utiliza en el contexto del Bi. El espacio entre la piel y los músculos se constituye en el espacio donde circulan los fluidos corpóreos (dando origen a la transpiración) y por donde se mueve el Wei Qi, protegiendo el cuerpo de los factores patógenos externos. Cuando el Wei Qi es deficiente y la condición del cuerpo es débil, el espacio entre la piel y los músculos se “abre”, volviéndose propenso a la invasión de Viento, Frío y Humedad.

*En la siguiente entrada trataré de la etiología y la diferenciación de los distintos tipos de Bi, para pasar a tratar, en una tercera entrada, el tratamiento correspondiente a cada síndrome.