El Pulmón
gobierna el Qi y la respiración, y se encarga particularmente de la inhalación
del aire. Por este motivo, y también por su influencia sobre la piel, es el
órgano intermediario entre el organismo y el medioambiente.
Controla
los vasos sanguíneos en la medida en que el Qi de Pulmón ayuda al Corazón a
controlar la circulación de la sangre. Se dice también que controla las “Vías
del Agua”. Esto significa que juega un papel vital en la circulación de los
Líquidos Orgánicos.
1.
GOBIERNA
EL QI Y LA RESPIRACIÓN
Esta
es la función más importante del Pulmón, ya que, del aire, extrae el “Qi puro”
para el cuerpo, que se combina después con el Qi de los Alimentos, proveniente
del Bazo.
Veamos los dos aspectos de esta función
vital:
a) Cuando
se dice que el Pulmón gobierna la respiración, se quiere decir que inhala “Qi
puro” (aire) y exhala “Qi impuro”. El constate intercambio y renovación del Qi
realizado por el Pulmón, asegura el buen funcionamiento de todos los procesos
fisiológios del cuerpo cuyo elemento básico es el Qi.
b) La
segunda manera en que el Pulmón gobierna el Qi, es mediante su actuación en el
mismo proceso de formación del Qi. Como veremos en la entrada dedicada al Qi,
el Qi de los Alimentos es extraído del alimento por el Bazo. De aquí se dirige
hacia el Pulmón, donde se combina con el aire inhalado para formar el Qi de
Reunión (Zong Qi). Como este proceso tiene lugar en el pecho, el pecho también
se llama “Mar del Qi” o “Mar Superior del Qi” (por oposición al Mar inferior
del Qi, situado debajo del ombligo). El Qi de Reunión, a veces, también es
llamado “Gran Qi del pecho”.
Después de su formación, el Pulmón difunde el Qi por todo el cuerpo para que nutra los tejidos y favorezca todos los procesos fisiológicos.
El
Qi de Reunión reside en el pecho y ayuda a las funciones de Pulmón y Corazón,
favoreciendo una buena circulación a los miembros y controlando la fuerza de la
voz. Un qi de Pulmón débil puede, en consecuencia, ocasionar cansancio, voz
débil y dificultades respiratorias.
Debido
a su papel de extraer el Qi del aire, el Pulmón es el órgano Yin más externo;
es la conexión entre el cuerpo y el mundo externo. Por eso, el Pulmón es
atacado fácilmente por factores patógenos externos y se dice de él que es el
órgano “tierno”, es decir, delicado y vulnerable a la invasión por factores
climáticos.
2.
CONTROLA
LOS CANALES Y LOS VASOS SANGUÍNEOS
Como
hemos visto, el Pulmón gobierna el Qi y el Qi es esencial para ayudar al
Corazón a hacer circular la Sangre. Por eso, aunque el Corazón controla a los
vasos sanguíneos, el Pulmón también juega un papel importante en el
mantenimiento de la salud de los vasos sanguíneos. A este respecto, su campo de
acción es algo mayor que el del Corazón ya que el Pulmón no solo controla la
circulación en los mismos vasos sanguíneos, sino también en todos los canales.
Como veremos en la entrada sobre el Qi, el Qi Nutritivo está estrechamente
ligado con la Sangre y ambos circulan juntos en los vasos sanguíneos y en los
canales. Como el Pulmón gobierna al Qi, controla la circulación del Qi a la vez
en los vasos sanguíneos y en los canales.
Si
el Qi del Pulmón es fuerte, la circulación del Qi y de la Sangre será buena y
los miembros estarán calientes. Si el Qi de Pulmón es débil, el Qi no será
capaz de impulsar a la Sangre, y los miembros, particularmente las manos,
estarán frías.
3.
CONTROLA
LA DISPERSIÓN Y EL DESCENSO
Es
extremadamente importante entender estas dos funciones si se quiere comprender
las patologías del Pulmón
FUNCIÓN DISPERSANTE
El
Pulmón tiene la función de dispersar el Qi Defensivo y los líquidos Orgánicos
por todo el cuerpo, al espacio entre la piel y los músculos. Ésta es una forma
en la que el Pulmón está relacionado con la piel. Esta función asegura que el
Qi Defensivo sea distribuido igualmente por todo el cuerpo bajo la piel,
realizando su función de calentar la piel y los músculos, protegiendo al cuerpo
de los factores patógenos externos. Si el Qi de Pulmón es débil y su función de
dispersión está alterada, el Qi defensivo no llegará a la piel y el cuerpo será
fácilmente invadido por los factores patógenos externos. Uno puede tener una
buena idea de lo que es realmente la función de difusión si observa lo que
sucede cuanto esta se encuentra alterada. Cuando una persona coge un resfriado,
la mayor parte de los síntomas y signos son una manifestación de una alteración
de la función dispersante del Pulmón. El Viento-Frío externo obstruye la piel,
impide que el Qi Defensivo se propague y, por tanto, altera la función
dispersante del Pulmón. El Qi no puede ser difundido y todo parece “bloqueado”.
Así es precisamente cómo se siente una persona que tiene un catarro fuerte, con
cefalea, rinitis, estornudos…
Además
de Qi, el Pulmón difunde también los Líquidos Orgánicos a la piel en forma de
una fina “neblina”. Ésta es la razón por la que el Jiao Superior se compara a
la “Neblina”. La fina neblina de os Líquidos Orgánicos hidrata la piel y regula
la apertura y el cierre de los poros y el sudor. Cuando esta función es normal,
los poros se abren y se cierran con normalidad, produciéndose una cantidad de
sudoración normal, fisiológica. Cuando esta función está alterada y hay un
estado de Plenitud, los poros están bloqueados y no hay sudor (esto ocurre en
la invasión por Viente-Frio con predominio del Frío). Si la patología es de
Insuficiencia, los poros están demasiado relajados y permanecen abiertos por la
que hay transpiración espontanea (esto sucede en la invasión externa de
Viento-Frío con predominio de Viento, o en patologías internas de insuficiencia
de Yang). Si la función del Pulmón de difundir los Líquidos Orgánicos está
alterada, los líquidos se pueden acumular bajo la piel, ocasionando edema
(generalmente, en la cara).
FUNCIÓN DESCENDENTE
Como
el Pulmón es el órgano que está situado más arriba dentro del cuerpo, los
textos médicos chinos lo llaman a menudo “la tapadera” o “el techo del carruaje
imperial”. Al estar en la posición más alta, su Qi tiene que descender. A esto
es a lo que se refiere la función descendente. Como ya hemos visto, el Qi de
Pulmón debe descender para comunicar con el Riñón y éste responde “reteniendo”
el Qi. La función descendente se aplica
no sólo al Qi, sino también a los Líquidos Orgánicos, ya que el Pulmón también
los dirige abajo, había el Riñón y la Vejiga. Si este movimiento de descenso del
Qi está alterado, el Qi de Pulmón no puede descender y el Qi se acumula en el
pecho, dando lugar a tos, dificultad para respirar y sensación de opresión en
el pecho. En algunos casos, puede afectar a la función del Intestino Grueso. Si
el Intestino Grueso no recibe el Qi del Pulmón, no tendrá la fuerza suficiente
para realizar la defecación (esto ocurre, particularmente, en las personas
mayores). En algunas casos, la alteración de la función de descenso del Pulmón
también puede ocasionar retención de orina (también, en particular, en las
personas mayores).
El
papel de las funciones descendente y dispersante del Pulmón puede resumirse de
la siguiente manera:
a) Asegura
la “entrada y salida” de Qi, asegura la libre circulación de Qi y regula la
respiración y los intercambios de Qi entre el cuerpo y el medioambiente.
b) Asegura
que todos los órganos sean correctamente nutridos por el Qi, la Sangre y los
Líquidos Orgánicos.
c) Evita
que el Qi de Pulmón se disperse y se agote.
4.
REGULA
LAS VÍAS DEL AGUA
Después
de haber recibido los líquidos refinados por el Bazo, el Pulmón los reduce a
una fina neblina y los “pulveriza” en el área bajo la piel de todo el cuerpo.
Este proceso es parte de la función dispersante del Pulmón. Cuando hay salud,
los líquidos son repartidos de igual manera por todo el cuerpo, siendo normales
la apertura y el cierre de los poros. Si esta función está alterada, los
líquidos se pueden acumular dando lugar a la aparición de edemas.
El
Pulmón envía también los líquidos al Riñón y a la Vejiga. El Riñón recibe los
fluidos y vaporiza parte de ellos antes de volverlos a enviar al Pulmón para
hidratarlos. La función del Pulmón de hacer descender los líquidos, influye
también en la función de la Vejiga. Si la función del Pulmón es normal, la
micción será normal, pero si dicha función está alterada, puede haber retención
de orina, especialmente en las personas mayores. Por esto, el Pulmón recibe a
veces el nombre de “Fuente Superior del Agua”.
Gracias
a esta función dispersante y descendente, el Pulmón es, por tanto, responsable
de la excreción de los Líquidos Orgánicos a través del sudor o de la orina.
5.
CONTROLA
LA PIEL Y EL CABELLO
Esta
función está estrechamente relacionada con las dos funciones precedentes. El
Pulmón recibe los líquidos del Bazo, y los difunde a la piel, por todo el
cuerpo. Esto es lo que nutre e hidrata la piel y el pelo. Si la función
dispersante del Pulmón es normal, la piel tendrá buen lustre, el pelo estará
brillante y la apertura y cierre de poros y sudoración serán normales. Si esta
función está alterada, la piel y el pelo se encontrarán insuficientemente
nutridos e hidratados, la piel estará arrugada y seca y el cabello estará
marchito y seco.
El
Pulmón influye sobre el Qi Defensivo que circula bajo la piel. Si el Qi de
Pulmón es fuerte, el Qi Defensivo también lo será y el individuo tendrá una
buena resistencia frente al ataque por factores patógenos externos. Si el Qi de
Pulmón es débil, el Qi Defensivo también lo será y como los poros estarán
abiertos, podrá haber transpiración espontánea. El individuo será propenso a
los ataques por factores patógenos externos. Cuando se da este tipo de
transpiración, se pierde una cierta cantidad de Qi Defensivo con el sudor. A la
inversa, sin un factor patógeno externo invade la parte externa del cuerpo, es
decir, la piel y los músculos (lo que puede suceder incluso si el Qi Defensivo
es relativamente bueno), obstruirá la piel y la circulación del Qi Defensivo,
lo que alterará la función dispersante del Pulmón causando estornudos, tos…
6.
SE
ABRE EN LA NARIZ
La
nariz es la puerta del Pulmón y la respiración se efectúa a través de ella. Si
el Qi de Pulmón es fuerte, la nariz estará abierta, la respiración se hará con
facilidad y el sentido del olfato será normal. Si el Qi de Pulmón es débil o si
el Pulmón es invadido por un factor patógeno externo, la nariz estará taponada
y podrá haber pérdida del sentido del olfato y estornudos. Si el Pulmón tiene
Calor, puede haber epistaxis, perdida de olfato y aleteo nasal (como sucede en
la neumonía).
Finalmente,
hay que recordar que también existen otros órganos, además del Pulmón, como
sucede con el Bazo de forma destacada, que afectan al sentido del olfato.
7.
ALBERGA
EL ALMA CORPÓREA
Se
dice que el Pulmón es la residencia del Alma Corpórea (Po) que forma el Yin o
la contraparte física del Alma Etérea (Hun). De forma similar al ideograma Hun,
el ideograma Po contiene también el radical Gui, que quiere decir “espíritu”
o “demonio”.
El
Alma Corpórea es la parte más física y material del alma humana. Podría decirse
que es la manifestación somática del alma. Está estrechamente unida a la
Esencia y podría decirse que es una manifestación de la Esencia en la esfera de
los sentimientos y de las sensaciones. La esencia es el fundamento para un
cuerpo sano y el Alma Corpórea contribuye a afinar y aclarar sensaciones y
movimientos. Como está relacionada con el Pulmón, el Alma Corpórea está también
íntimamente ligada a la respiración.
En
el plano emocional, el Alma Corpórea está directamente afectada por emociones
tales como la tristeza o la pena que reprimen sus sentimientos y bloquean sus
movimientos. Como el Alma Corpórea reside en el Pulmón, estas emociones tienen
efectos poderosos o inmediatos sobre la respiración, que puede considerarse
como el latido del Alma Corpórea. La tristeza y la pena constriñen al Alma
Corpórea , dispersan el Qi de Pulmón y retienen la respiración. La respiración
corta y superficial de una persona que está triste y deprimida constituye un
ilustrativo ejemplo. De forma semejante, la respiración rápida y superficial
que solo se produce en la parte más alta del pecho, casi en el cuelo, es la
expresión del bloqueo del Alma Corpórea y del Qi de Pulmón. Por eso, a menudo,
tratar el Pulmón es muy importante cuando hay problemas emocionales debidos a
la depresión, a la tristeza, a la pena, a la ansiedad o al duelo. Lieque P7
tiene un poderoso efecto liberador sobre las emociones reprimidas, mientras que
Pohu V42 tonifica el Qi de Pulmón y reafirma al Alma Corpórea. Así, la
implicación del Alma Corpórea en la práctica clínica es mayor que la del Alma
Etérea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario